En una reciente declaración, Eduardo Casasola, presidente del Consejo de Vigilancia de la Cooperativa de Telecomunicaciones de Tarija (Cosett), expuso su preocupación por la falta de fiscalización dentro de la cooperativa, revelando que ciertos grupos, incluidos trabajadores conocidos, han intentado evitar que se realicen auditorías internas. Casasola destacó que no permitirá que su labor de fiscalización sea obstaculizada, y, en este sentido, indicó que tiene todos los descargos respaldados, incluso mencionó haber enviado cartas notariadas para reforzar su trabajo. “A mí no me va a vencer nadie. Esa cooperativa en algún momento tiene que transparentarse, así muera”, expresó de forma contundente.
Asimismo, Casasola afirmó que los tarijeños deben saber quiénes son los responsables y cómplices que llevaron a la cooperativa a una situación financiera comprometida. Consideró inconcebible que una empresa de telecomunicaciones, en un mercado global, se encuentre en quiebra. “La cooperativa hoy por hoy se constituye en uno de los mejores negocios más rentables del mundo. En ningún lugar del mundo una empresa de telecomunicaciones podría estar en esa situación”, añadió, asegurando que, eventualmente, dirá nombres y apellidos de los responsables de esta crisis.
El Presidente del Consejo también hizo una crítica hacia las instituciones creadas por el actual gobierno, especialmente a entidades como la ASFI, la ATT, y otras, las cuales, según él, se convirtieron en cajas recaudadoras de la ineficacia. Casasola destacó que el sistema operativo de telecomunicaciones en Bolivia está “por los suelos”, lo que pone en evidencia la falta de fiscalización y transparencia en áreas clave como telecomunicaciones, minería y agua. Finalmente, dejó claro que espera que este gobierno, que finaliza este noviembre, sea reemplazado por una administración más eficiente y comprometida con la transparencia.

La Voz de Tarija