El ministro de Justicia, César Siles, informó que el exministro de Gobierno, Arturo Murillo, será deportado a Bolivia una vez que cumpla su condena en Estados Unidos y comparezca ante un juez migratorio el próximo 21 de junio. Murillo fue sentenciado por utilizar el sistema financiero estadounidense para lavar dinero proveniente de actos de corrupción cometidos durante su gestión.
Siles descartó la posibilidad de que Murillo sea enviado a un tercer país, aclarando que no posee nacionalidad croata, como se había especulado. Asimismo, señaló que no corresponde un pedido de asilo político, ya que esta figura humanitaria no aplica para personas condenadas por delitos comunes como el lavado de dinero.
El ministro recordó que el exjefe de gabinete de Murillo, Sergio Méndez, fue deportado directamente a Bolivia tras cumplir su condena en Estados Unidos, lo que refuerza la viabilidad de este procedimiento en lugar de una solicitud de extradición, que podría alargar el proceso.
Murillo enfrenta varios procesos pendientes en Bolivia, no solo por el sobreprecio en la compra de gases lacrimógenos, sino también por los casos Senkata, el préstamo de material antidisturbios desde Argentina y Ecuador, entre otros. El Gobierno espera que, una vez deportado, sea procesado por todos estos hechos ante la justicia nacional.