El presidente de la Fedjuve, Celestino Barro, señaló que la federación ha estado trabajando en el control del precio y gramaje del pan, y recordó que de un quintal de harina se obtienen alrededor de 1.080 panes con un gramaje de 75 a 80 gramos. Explicó que actualmente los panificadores están entregando dos panes por 2,50 bolivianos, lo que significa que en realidad se está cobrando un boliviano por cada pan, con una ganancia aproximada de 50 centavos por unidad.
Barro indicó que, según estos cálculos, los panaderos deberían ofrecer seis panes por un boliviano, pero en la práctica solo entregan cinco. “Eso es lo que más o menos se maneja en cada una de las tiendas”, afirmó.
El dirigente adelantó que la federación continuará fiscalizando y que se pedirá a los mercados espacios para vender pan de manera directa, garantizando así precios más accesibles para la población. Señaló que en la práctica los consumidores podrán comparar en la balanza y elegir dónde comprar, considerando que en algunos lugares puede haber hasta 10 centavos de diferencia.

“La crisis económica que estamos pasando es dura y vuelvo a decir, la harina ha bajado, el azúcar ha bajado, entonces no hay donde perderse”, declaró Barro, cuestionando el argumento de los panificadores para mantener los precios elevados.
La Voz de Tarija