Bolivia cuenta con un excedente de al menos 100.000 toneladas de carne de res lista para exportar, luego de cubrir la demanda interna. El país tiene un cupo oficial de 44.000 toneladas para exportación, de las cuales 28.600 ya fueron enviadas a otros mercados internacionales.
El Servicio Nacional de Sanidad Agropecuaria e Inocuidad Alimentaria (Senasag) habilitó a los frigoríficos Frigor, BFC, Fridosa y Sofía para comercializar carne bovina en Egipto, tras verificar el cumplimiento de requisitos sanitarios y de certificación HALAL. La apertura permite acceder a cortes de alto valor económico, con ingresos superiores a los de otros mercados.
Las exportaciones de carne bovina boliviana alcanzaron un valor de 92,7 millones de dólares hasta julio de 2025, y durante todo el año sumaron 189,3 millones de dólares.

El levantamiento del veto a las exportaciones, vigente desde febrero de 2025, permitió restablecer el flujo hacia el mercado internacional, equilibrando el abastecimiento interno y generando divisas para el país.
Con esta apertura, Bolivia busca fortalecer su presencia en el mercado global de alimentos, diversificar destinos de exportación y aumentar los ingresos de los productores nacionales.